Al principio no estaba muy segura de la combinación de colores porque yo elegí el color del abanico, morado, y mi peke de 2 años las pinturas.... y como no, eligió el blanco plateado y el rosa.
Una madre hace cualquier cosa para darle un gusto a su hija, y me puse manos a la obra.
Se mascaba la tragedia, pero .... OH MILAGRO!!
Resulta que madre e hija son un equipo genial porque los colores casan a la perfección.
Os pongo alguna fotillo tipo collage de estas que tanto me gustan para que veáis algún detallito más.
Yo ando como una niña con zapatos nuevos... me encanta :)
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